Alucinante diseño para Centro de Música

Marzo 2019

Los arquitectos de fama mundial Diller Scofidio + Renfro, celebres por su proyectos poco convencionales revelan los primeros diseños conceptuales para el Centro de Música en Londres.

Reconocidos por ser uno de los estudios que no le temen a la creatividad al momento de diseñar proyectos arquitectónicos, la firma estadounidense Diller Scofidio + Renfro toma las riendas para construir y diseñar un nuevo Centro de Música en Londres.

Financiado por tres grandes organizaciones culturales de gran reconocimiento internacional Barbican Centre, La Orquesta Sinfónica de Londres y Guildhall School, organizaciones que se caracterizan por su compromiso con la educación, la cultura y las artes, tienen grandes planes para cuando esta monumental obra esté concluida.

Planes que incluyen un gran crecimiento en sus programas actúales de aprendizaje y descubrimiento, que tendrán el objetivo de ofrecer experiencias musicales de calidad para niños jóvenes y comunidades escolares de diferentes puntos de todo Londres.

También contará con el apoyo de City of London Corporation, órgano de gobierno municipal de la cuidad, que muestran su gran interés por apoyar proyectos audaces y ambiciosos que favorezcan a dar la Cuidad de Londres un nuevo aire moderno y actual.

Este nuevo Centro de Música está previsto para ser un lugar de clase mundial para la educación y el encuentro de todos los géneros musicales. Sirviendo para inspirar a una nueva generación que ama y se dedica a la música, en todos sus ámbitos, también como un espacio urbano que se pueda disfrutar a un sin la necesidad de comprar una entrada.

Estará ubicado en el actual sitio del Museo de Londres, que será reubicado en West Smithfield. Justo en el centro de uno de los principales andadores culturales de la cuidad de Londres, conocido como el Culture Mile, lugar ideal para el encuentro cultural y artístico de todo tipo.

A parte de crear un nuevo edificio emblemático para Londres y el Reino Unido, la propuesta busca renovar y transformar el área pública del Museo de Londres, para crear un espacio acogedor, abierto y sin autos, que se vincule con el ambiente cultural a su alrededor y atraiga a más turistas y de un nuevo atractivo a la zona.

Los diseños conceptuales del centro muestran que no solo contara con una sala de conciertos de clase mundial, sino también espacios adecuados para ensayos, presentaciones y actividades educativas. Espacios pensados para que personas de todas las edades y orígenes experimenten el placer de hacer música de primera mano.

El objetivo es convertir el sitio en un espacio peatonal abierto, libre de tráfico y así sea posible realizar actividades al aire libre, y se tenga una vista completa tanto del interior del vestíbulo del centro como de la vía peatonal.

La sala de conciertos será el principal atractivo del centro, con capacidad para 2000 personas, los asientos están diseñados para no interferir con la acústica del lugar, y así el sonido sinfónico sea excepcional, pero también versátil para adaptarse a todos los géneros y disciplinas.

“Imaginamos una salada de conciertos para el siglo XXI, a medida pero adaptable: adecuado para el sonido sinfónico sin precedentes, pero lo suficientemente versátil para acomodarse a trabajos más creativos de diferentes disciplinas y géneros” dijo Elizabeth Diller, cofundadora se el estudio. La tecnología digital también está pensada para que sea parte del proyecto, integrándola completamente en el diseño y en la infraestructura del edificio.

En la parte superior del edificio se encuentra The Coda, un espacio para eventos y espectáculos contemporáneos, flexible y con un aire intimo, con vista hacia el horizonte de Londres. Destacando por su luminosidad en el firmamento de la cuidad atrayendo a los visitantes al nuevo destino cultural de la ciudad.

Por fuera el Centro de Música, tendrá un aspecto futurista y poco convencional, como una torre inclinada que se posicionara como un faro luminoso en el centro de la Culture Mile, y que se unirá con la galería Tate Modern, el Millennium Bridge y la Catedral de San Pablo.

Dicha área en la próxima década tendrá múltiples transformaciones, que incluyen nueva infraestructura de transporte, mejoras en las calles y vías peatonales más amplias que vinculen los destinos culturales de fama mundial ya existentes en el área.

En cuanto a su construcción, el edificio tendrá un costo de 288 millones de libras, los cuales serán financiados por las asociaciones involucradas en el proyecto y por diversos patrocinadores privados y comerciantes que buscan impulsar la zona.

Este nuevo centro promete convertirse en un futuro edificio representativo de Londres, que vincule todos los aspectos de una ciudad en continuo crecimiento. “Visualmente impresionante, acústicamente perfecto y con un compromiso para ser totalmente inclusivo, el centro para la música reunirá a destacados artistas y a diversas audiencias”.